Según la versión de los guardacostas, en la madrugada del viernes a este sábado localizaron un bote inflable a motor en el que todos sus ocupantes eran extranjeros y que parecía a la deriva, por lo que procedieron a remolcarlo.
El viernes arribaron a las islas de Kos y Samos 38 refugiados, y aumentó el número de personas detenidas en las islas griegas se contabilizó en 7.940. Grecia trata de disminuir la presión sobre los campamentos de refugiados y centros de detención cuya capacidad haya sido superada para tratar de evitar violentos incidentes como los del martes en Lesbos, que provocaron 15 heridos. Para ello el Ejecutivo heleno tiene previsto trasladar a decenas de inmigrantes a otros espacios disponibles.