Lifschitz señaló que hubo coincidencia con los miembros de las entidades “en la necesidad de gestionar ante el gobierno nacional soluciones que tienen que ser extraordinarias, a la altura de la magnitud del daño producido por las inundaciones”.
En este sentido, el gobernador graficó que se trata de “pérdidas por varios miles de millones de dólares directos de producción, que luego repercutirán en la vida de los pueblos, el empleo, por lo que vamos a tener efectos complicados en lo económico, productivo y social durante por lo menos un año”.
El ministro de la Producción, Luis Contigiani, coincidió con el gobernador en indicar que “fue una importante reunión, porque asistieron todas las instituciones del sistema agropecuario y agroindustrial de Santa Fe. El encuentro se da en un marco de emergencia importante, que nunca se vio en la provincia, y que va a necesitar de soluciones extraordinarias sobre todo del gobierno nacional”.