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El rumor que nació sobre su presunta revancha frente a Julio César Chávez Jr., a quien venció en 2012, ya se diluyó: “Viajé para firmar y hacer una revancha con Chávez Júnior, pero faltó la firma de él. No quiso firmar, no pudo, tenía problemas con el peso porque no iba a llegar con los 76 kilos que habíamos acordado. Si no, el 17 de noviembre tendría que estar combatiendo contra él en Las Vegas”, explicó el púgil argentino.
El nacido en Quilmes contó que viajó a principio de año a España para entrenarse y ponerse en forma con la clara idea de volver a boxear, y que los resultados fueron mejores de lo esperado: al mes tenía 15 kilos menos y a los dos ya había bajado 22. Respecto a la fecha de su próxima pelea afirmó: “Creo que va a salir en muy pocos días, no hablo de semanas, creo que en días se va a definir un nuevo combate“.
Finalmente, el excampeón del mundo en las categorías superwelter y medio reconoció que hoy está disfrutando de los entrenamientos, cosa que antes no podía hacer ya que “vivía una vorágine vertiginosa, con tantas ganas de no fallar, no equivocarte, no perder puestos en el ránking o no quedar fuera del mercado”.
