Asimismo Lamberto señaló que en el caso de este servicio hay que tener en cuenta tres componentes fundamentales: boca de pozo o producción, distribución y el transporte. La producción se licitó en una subasta previo a la audiencia pública, donde se abonó un 15 por ciento promedio superior al vigente en dólares, y eso es lo que tienen que pagar las distribuidoras.
“El problema de la audiencia pública es que este tema no tuvo la suficiente explicación”, dijo y aclaró que no puede existir incremento tarifario sin audiencia pública, la cual a su vez debe ser escuchada, aunque en la realidad aseguró que gran parte de lo que se dice no se tiene en cuenta.