Poco lo que pudo hacer el quíntuple campeón del mundo para seguir la cola del auto de su escudero, pues Bottas no solo manejó de manera impecable, sino que supo aprovechar al máximo la estrategia de un equipo que, como en años anteriores, parece estar un nivel por arriba de los demás.
De hecho, Ferrari y Sebastian Vettel intentaron cambiar las cosas, pero Hamilton fue un buen escudero para Bottas y no dejó pasar al alemán, quien al final solo pudo terminar en la cuarta casilla por detrás de Max Verstappen y su Red Bull.
Bottas no ganaba una carrera hace do años, cuando se consagró en el GP de Abu Dabi, por lo que este triunfo fue un desahogo para un corredor que en años anteriores tuvo que vivir a la sombra e Hamilton y que ahora, comenzando 2019, tiene, por ahora, la libertad de meter el acelerador a fondo sin preocuparse por alguien más.