En declaraciones radiales, Grobocopatel garantizó que las liquidaciones de la cosecha se realizará entre abril y junio y "van a ser grandes, una de las más grandes de la historia argentina". "No va a haber más remedio que vender, porque hay que pagar cuentas, hay que vivir y la opción de ir al banco a pedir créditos es muy caro", enfatizó.
Según dijo, "lo que hay que vender es un porcentaje sustancial de lo que se va a cosechar. Se calcula que hay un 80% de lo que se recolecta que es para pagar deudas de insumos. El productor va a ir liquidando a medida que va cosechando". El empresario indicó además que el productor "sigue animado con vistas a futuro, sigue apostando para producir. Si bien tenemos un montón de tareas por delante y la Argentina puede producir mucho más de lo que lo hace, la realidad es buena".