Uno de los principales argumentos para quedarse dentro del país fue que, de lo contrario, la región quedaría fuera de la Unión Europea (UE) y no podría volver por muchos años. Por eso, cuando menos de dos años después, una ajustada mayoría de los ciudadanos del Reino Unido votó salirse de la UE, muchos escoceses, especialmente los nacionalistas liderados por la ministra principal y jefa del gobierno regional, Nicola Sturgeon, comenzaron a exigir un segundo referendo independentista.
Después de tres años de crisis política y tres gobiernos conservadores que no lograron concretar el Brexit, Sturgeon anunció esta semana que pedirá a Londres organizar un referendo sobre la independencia escocesa el mismo día de las elecciones anticipadas: el próximo 12 de diciembre. “No creo que la gente de este país piense que los referéndum sean lo mejor para mantener la armonía”, aseguró hoy en una entrevista con la cadena Sky News Johnson, el favorito según todas las encuestas para los comicios de diciembre, informó la agencia de noticias EFE.