Asimismo se informó que durante toda la noche trabajaron 90 bomberos, con autobombas y camiones cisternas en los alrededores de las localidades rurales de Charbonier, El Carrizal, Escobas y La Manga para proteger viviendas cercanas al desplazamiento del fuego.
El otro foco se encuentra situado en la serranía alta de Pan de Azúcar, en las cercanías de la ciudad de Cosquín, con un frente que avanza hacia la localidad de Bialet Massé y La Calera.
El director de Defensa Civil de la provincia, Diego Concha, manifestó esta mañana a los medios locales que desde hace dos semanas se han intensificados los incendios, y afirmó que «son los más grandes e intensos de los últimos años», además por los daños ambientales que generan al bosque nativo.
El funcionario añadió que la provincia se encuentra en «alerta máxima por el alto riesgo de incendios», y que «el combate es muy complejo por las condiciones climáticas», debido a los fuertes vientos y falta de lluvias.