En un principio hallaron elementos que podrían haber sido del joven en los vehículos que utilizó la policía para el operativo que había llevado a cabo en la Ruta Nacional 3. Luego, se encontró en la comisaría una suerte de amuleto que llevaba siempre consigo y que le habría entregado su abuela. En las últimas horas, se dio con una de las pruebas más absolutas.
En el teléfono celular de uno de los policías implicados, los peritos encontraron una foto del DNI del muchacho que por estas horas está desaparecido.
Por el momento pudo ser acreditado que al joven se lo detuvo dos veces antes de desaparecer. La primera se dio en Mayor Buratovich y luego en Teniente Origone, ambas veces por “violar la cuarentena”.
Facundo iba en dirección a la casa de su ex pareja.
La zona en la que se hallaron los “restos humanos esqueletizados” coincide con la celda telefónica en la que se activó por última vez el celular de Astudillo Castro.
“Se encontró un cuerpo, un esqueleto completo en estado absolutamente disecado en la costa de Villarino Viejo, partido de Villarino, entre Cabeza de Buey y Cerri”, dijo Luciano Peretto, uno de los abogados de la querella.
Según precisaron, en la mañana de este domingo se hará presente un grupo de 4 peritos del Equipo Argentino de Antropología Forense, con el objetivo de determinar si el cuerpo encontrado es el de Facundo Astudillo Castro. Para Verónica Castro, su hijo fue víctima de una desaparición forzada por la policía bonaerense.