La Corte Suprema de Justicia desestimó hoy el pedido de “tratamiento urgente” de los camaristas Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi para evitar que el Senado revise sus designaciones y eventualmente los devuelva a sus tribunales de origen. A través de un acuerdo virtual, los cinco magistrados definieron que el pedido de los camaristas no revestía urgencia pero se notificaron de la medida para cuando consideren el pedido de “salto por instancia” o “per saltum” de Bruglia y Bertuzzi.
Ayer, ambos jueces presentaron un escrito digital ante la Corte solicitando que intervenga ante la inminencia de la sesión especial convocada por el Senado para mañana, que votará su continuidad o suspensión como jueces de la Cámara Federal porteña.
Tanto Bruglia como Bertuzzi eran jueces del Tribunal Oral Federal 4 cuando fueron trasladados en 2018, por un decreto del entonces presidente Mauricio Macri, a la Cámara Federal porteña, primera instancia de apelación de la docena de juzgados federales ubicados en la Ciudad de Buenos Aires.
Esta situación fue considerada “irregular” por el Consejo de la Magistratura, a instancias de un informe del representante del Poder Ejecutivo, Gerónimo Ustarroz, que detectó 10 casos de asimetrías evidentes entre el tribunal de origen y el de destino.
El Senado entonces decidirá mañana si concede o niega el acuerdo, más allá de que el senador oficialista Oscar Parrilli anticipó que “no se les va a prestar el acuerdo a Bertuzzi y Bruglia y tendrán que volver a sus juzgados”.
La decisión del Senado no detendrá, sin embargo, la estrategia judicial de los dos jueces que presentaron un amparo, que fue rechazado, y fueron entonces a la Corte solicitando un “salto por instancia” por la “gravedad institucional” que perciben en el avance sobre su “estabilidad” como jueces, un principio tutelado por la Constitución.
La Corte no tiene plazos para pronunciarse aún cuando el espíritu de una medida cautelar es impedir que se siga lesionando un derecho y es por eso que requiere cierta premura.