El presidente Alberto Fernández se reunió esta mañana en el Vaticano con el papa Francisco, en el marco de su cuarta y última escala de la gira europea que esta semana lo llevó a Portugal, España y Francia.
Acompañado por la primera dama Fabiola Yañez y su comitiva, el presidente arribó a las 4.50 hora argentina (9.50 hora de Roma) al Vaticano, donde fue recibido por autoridades de la Casa Pontificia y un cordón de honor de la Guardia Suiza, que se encarga de la seguridad del Papa y la Santa Sede.
Luego, tras los saludos de rigor, comenzó la audiencia a solas entre el Papa y el mandatario argentino en el estudio del Aula Pablo VI -conocido dentro del Vaticano como "Il Fungo", que se extendió durante 30 minutos.
Tras la reunión a solas, se tomó una foto oficial y hubo un saludo del pontífice a los integrantes de la comitiva oficial, así como intercambio de obsequios, lo que se extendió hasta las 10.35 hora de Roma.
El Papa saludó uno por uno a los integrantes de la comitiva argentina e intercambió saludos y palabras con algunos de ellos, informaron fuentes oficiales.
Integran la delegación oficial, además de Yañez, el canciller Felipe Solá; el ministro de Economía, Martín Guzmán; el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello; el secretario de Culto, Guillermo Oliveri; y el secretario de Comunicación y Prensa, Juan Pablo Biondi.
Tras el encuentro con el Papa, el mandatario se encuentra reunido con el secretario de Estado, Pietro Parolin, y monseñor Paul Gallagher, secretario para las Relaciones con los Estados, encuentro del que también participan el canciller Solá y Oliveri.
Luego de la audiencia con el Papa, Fernández almorzará con su par de Italia, Sergio Mattarella, en el Palacio del Quirinale, para después mantener una reunión de trabajo, en el Palacio Chigi, con el presidente del Consejo de Ministros, Mario Draghi.
En una entrevista con Télam antes de partir hacia Europa, el secretario de Culto, Guillermo Oliveri -que integra la delegación argentina- remarcó las coincidencias entre el Gobierno y Francisco en relación a la gestión de la pandemia y la necesidad de que las vacunas lleguen en forma igualitaria a todos los países y destacó la "ayuda silenciosa" del pontífice argentino en el proceso de renegociación de la deuda.