Félix Auger-Aliassime eliminó a Diego Schwartzman en la primera ronda del Abierto de Roma al vencerlo por 6-1 y 6-3. El argentino, que cayó al décimo lugar del ranking ATP esta semana atraviesa un pésimo momento tenístico y no para de perder en primeras rondas ante rivales de inferior nivel.
El porteño está en un profundo pozo del que no puede salir, no le encuentra la vuelta, no importa el rival, ni la superficie, indefectiblemente pierde con quien se le ponga enfrente. Su golpes parecen haber perdido potencia, no generan daño al rival y ya no hace lo que mejor hacía, que era ser uno de los mejores devolvedores de saque del circuito y destacarse por sus desplazamientos.
Hoy sucumbe ante jugadores que hace un año superaba con cierta facilidad. Algunos atribuyen a un bajón anímico la merma en su rendimiento, cierto es que sea cual fuera el motivo, no está siendo competitivo, y pronto se caerá del Top Ten.