Por las Eliminatorias Sudamericanas, Argentina y Chile disputaron un entretenido encuentro en Calama, en el que el elenco nacional se impuso por 2 a 1 con tantos de Ángel Di María y Lautaro Martínez. El tanto del local fue de Brereton. El conjunto albiceleste lleva 28 fechas sin conocer la derrota.
El primer tiempo entretenido, el conjunto trasandino abusó de la pierna fuerte en los primeros minutos, y el elenco nacional no pudo asociarse para crear juego, a pesar de su mayor tenencia de pelota.
Ángel Di María enganchó para adentro, acomodó la zurda y puso el 1 a 0, para poner a los de Scaloni (Samuel) en ventaja, con un gran disparo desde afuera del área. Chile comenzó a ponerse a tono, con más fuerza que fútbol fue inquietando a Martínez.
El "inglés" Brereton igualó de cabeza, tras un centro desde la derecha. La pelota le quedó lejos a Molina que ni saltó y el Dibu quedó atado al primer palo, el cabezazo preciso puso la igualdad.
Minutos después, De Paul, que casi no apareció en la primera etapa encabezó el contragolpe su disparo fue rechazado al medio por el Bravo dio rebote al medio y Lautaro Martínez la empujó al gol para poner el 2 a 1. Cuando el primer tiempo se moría, el "Dibu" sacó un gran remate de Díaz por arriba del travesaño un remate con destino de gol.
La segunda mitad fue un decálogo de patadas, Chile pegó más de la cuenta ante la permisividad del árbitro brasileño. Las ocasiones de gol fueron escasas, el conjunto local llenó de centros el área de la Argentina, la defensa respondió con solvencia siempre y de esta forma se quedó con un buen triunfo que le permite seguir como escolta de Brasil, ambos clasificados.
La única pérdida de la selección fueron las amarillas, Ottamendi, De Paul y Paredes vieron una nueva amarilla y no jugarán ante Colombia en Córdoba. Se suman a los casos de coronavirus y a Messi por no ser convocado, por acuerdo con su club. Jugó un partido aceptable, en la altura de Calama, contra un rival que debía ganar para buscar la clasificación, mantuvo el invicto y le dio algo de rodaje a jugadores no titulares habitualmente.