El presidente de Rusia, Vladimir Putin, llamó al ejército ucraniano a “tomar el poder” en Kiev y derrocar al presidente Volodimir Zelenski y a sus funcionarios. Los tildó de “neonazis y drogadictos”.
“Tomen el poder entre sus manos. Me parece que será más fácil negociar entre ustedes y yo”, lanzó el mandatario ruso en una intervención en la televisión local. Dejó en claro que no combate a unidades del ejército sino a formaciones nacionalistas que se comportan “como terroristas” usando a civiles “como escudos humanos”.