Los trabajos en sectores dañados de la autopista Rosario-Córdoba entre Carcarañá y la localidad cordobesa de James Craik, comenzaron a ejecutarse el pasado 23 de febrero siguen a ritmo sostenido. Las tareas consisten en reemplazar unas 3.000 losas de hormigón (ya se repararon entre los kilómetros 340 y 342, en ambos sentidos. Esto sin necesidad de desvíos ni reducción de carriles). Con un presupuesto oficial de inversión de $ 1.208.791.282 se repararán 248 kilómetros.
Se reemplazarán losas de hormigón simple de variadas dimensiones que están deterioradas. Desde que se inauguró la autopista, es la primera vez que se hace este tipo de trabajos.
Los trabajos fueron encarados por la empresa pública Corredores Viales, concesionaria de la autopista y la ruta nacional 9 y Rosario-Córdoba. A través de la licitación pública 10/21, se adjudicaron a la UTE conformada por Edeca S.A. y Mundo Construcciones S.A.
Las tareas se enmarcan en el plan de obras de seguridad vial, impulsado por el Ministerio de Obras Públicas de la Nación y la Dirección Nacional de Vialidad (DNV). Tienen como objetivo mejorar las condiciones de seguridad en el tránsito de rutas nacionales administradas por la concesionaria.
Este plan incluye accesos, rotondas y colectoras en distintas localidades de ocho provincias del país. Corredores Viales es una empresa pública cuyos accionistas son el Ministerio de Obras Públicas de la Nación y Vialidad Nacional. Administra seis mil kilómetros de rutas y autopistas en 13 provincias argentinas.
Para proyectar esta obra se realizó un estudio del tránsito y se tuvo en cuenta que es una de las rutas nacionales con mayor volumen del país.
Esto debido a su ubicación estratégica y que vincula a las tres ciudades más pobladas de la Argentina como son la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba), Rosario y Córdoba.
Según datos de la DNV por esta autopista circulan en promedio 11.600 vehículos por día: el 56,7% son autos, el 13,5 % camiones con acoplado, el 4,8% camiones sin acoplado y el 2,5% micros.
A partir del relevamiento de la superficie del pavimento, se pudieron identificar aquellas fallas más relevantes y elaborar el proyecto que contempla la reconstrucción de 72.900 metros cuadrados del pavimento rígido existente.