La causa contra Mauricio Macri por supuesto envío de armas a Bolivia con el fin de derrocar a Evo Morales avanza a otros funcionarios de su gobierno. Ahora, como imputados en la investigación se encuentran el expresidente; sus ministros de Seguridad y Defensa, Patricia Bullrich y Oscar Aguad; y el entonces embajador en Bolivia, Álvarez García.
También se señalaron al exdirector general de la Gendarmería Gerardo José Otero; y los entonces directores de Logística y Operaciones de esa fuerza, Rubén Carlos Yavorski y Carlos Miguel Recalde, respectivamente.
El fiscal que lleva adelante la causa, Claudio Navas Rial, también imputó a tres exfuncionarios de la administración Cambiemos: Marcos Peña (jefe de Gabinete), Jorge Faurie (canciller) y Fulvio Pompeo (secretario de Asuntos Estratégicos de la Nación).
Según el embajador Ariel Basteiro, el accionar del Poder Ejecutivo argentino coincide con «un contrabando a la mejor manera de Macri», de igual forma que «contrabandeaba autopartes».
Además, comunicó a Télam que «llevó negocios» por fuera de la ley. «Todo hace creer que a fin de este año se va a conocer el fallo en Bolivia», apuntó el diplomático y estimó que el juicio «empezará en agosto o septiembre próximo». Basteiro indicó que las armas fueron un “regalo” para la expresidenta de facto Jeannine Áñez, actualmente condenada.
Con el argumento de cuidar la Embajada argentina de las manifestaciones que se esparcían por toda la ciudad de La Paz tras el golpe de Estado a Morales, un avión Hércules C-130 perteneciente a la Fuerza Aérea Argentina (FAA) llegó el 13 de noviembre de 2019 al Aeropuerto Internacional de El Alto. Cargaba 70.000 cartuchos antimotines, 100 spray gas pimienta y 700 granadas de gas.
El Gobierno de Ecuador también fue acusado de cómplice.
«La por entonces ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, había autorizado que el día 12 de noviembre salgan municiones desde los depósitos de Gendarmería en El Palomar para subirlo a un avión y llevarlo a Bolivia», detalló el embajador.
«Hubo armamentos que entraron legalmente, con los trámites aduaneros hechos, pero había unas siete u ocho cajas que nadie sabía qué eran», agregó.