En los 16avos de final de la Copa Argentina, Quilmes eliminó a Rosario Central de la presente edición. Habían empatado en los 90 minutos 1 a 1 con goles de Nico González y Servio de penal. El vencedor se medirá en la próxima ronda con Deportivo Madryn.
Quilmes fue mucho mejor que Central en la primera etapa, un equipo de la Primera Nacional, que marcha 23 en la tabla de posiciones, y puso algunos suplentes para abocarse de lleno a la lucha por no perder la categoría maniató al equipo de Cárlos Tevez, que se mostró anodino, apático y confuso.
El cervecero avisó varias veces antes de convertir, le había robado la pelota allá por el cuarto de hora y empezó a taladrar contra Servio. Los defensores canallas comenzaron a equivocarse a entregar pelotas a los atacantes rivales y nadie en la mitad de la cancha lograba tener siquiera el balón, ganar una falta o alejar el peligro para que no pase lo inevitable.
Y pasó, Servio logró desviar un cabezazo certero de pique al piso, pero el rebote le quedó a Nico González, que de zurda y arriba clavó el merecido 1 a 0. El travesaño había impedido antes que la apertura del marcador fuera más temprana.
Se fueron al vestuario con ventaja mínima pero pudieron ser más, eso fue lo mejor que pudo pasarle al conjunto auriazul, que jugó un pésimo primer tiempo, y al menos quedó a tiro en el score, en el juego fue superado con amplitud.
En la segunda mitad Quilmes fue más cauteloso, de todas formas tuvo algunas chances de aumentar, siempre producto de errores de su rival. Central estaba carente de ideas, el juego no fluía, y los minutos pasaban. Tevez se decidió a poner chicos en la cancha y uno de ellos, Cerrudo que juega en la reserva encaró adentro del área y lo derribaron.
Historia conocida, Servio cambió por gol, el arquero canalla convirtió los cuatro que pateó y puso el empate nuevamente con disparo suave engañando al arquero. Finalizó el partido con empate 1 a 1 y fueron a penales y allí Almada y Rodríguez malograron sus respectivos disparos y Quilmes se quedó con la llave a pesar de que Pavone había errado el suyo. Central jugó pésimo, lo pudo haber perdido en los 90 minutos y pero llegó injustamente a los penales. Fin de su historia en la presente edición de la Copa Argentina, que alguna vez supo levantar en el 2018.
FOTO ROSARIO CENTRAL