La crisis energética y el aumento de los precios de los productos presiona sobre el nivel de vida de los británicos. En los últimos días, analistas dieron a conocer que la inflación de la isla podría alcanzar el 18% para 2023 mientras que el aumento de las tarifas de gas y electricidad empujará a los ciudadanos a un invierno dramático.
Buena parte del mundo enfrenta el mayor crecimiento de los precios desde principios de los años ochenta. Francia registró hasta el momento un aumento del 6,8%, Italia el 8,4%, Alemania el 8,5%, Portugal el 9,4%, España alcanzó el 10,8%, Países Bajos el 11,6% y Polonia el 15,6%, entre otros.
Según informó el Organismo Nacional de Estadística (ONS) del Reino Unido, los precios se dispararon en julio hasta alcanzar el 10,1% en lo que va del año, lo que representa el nivel más alto en 40 años. La suba en los alimentos ha sido la mayor contribución al alza de la tasa de inflación anual entre junio y julio.
En ese marco, analistas de Citi dijeron esta semana que la inflación británica alcanzará el 18% a principios de 2023, su tasa más alta desde 1976, a pesar de que el Banco de Inglaterra ya ha subido las tasas seis veces desde diciembre.