La ordenanza sancionada ayer por el Concejo Municipal ya genera polémicas tras conocerse que este flamante organismo estará a cargo de una sola persona dependiente del intendente, Pablo Javkin.
La flamante unidad busca combatir el lavado de dinero que en la ciudad, que viene siendo utilizado desde hace años por las diferentes bandas ligadas al narcotráfico.
“Una agencia debería tener patrimonio propio, personalidad jurídica y autonomía de gestión. Nada de lo que tiene esta agencia”, criticó la concejala del bloque Iniciativa Popular, Fernanda Gigliani, que votó la ordenanza en general, pero se opuso en particular a ese tipo de organismo.
La edila agregó que un ente de control debe tener personal especializado, como se había conversado en las reuniones de comisión en la que participaron expertos en la materia, algo que no se plasmó en la norma sancionada.
“Esta agencia es una oficina que depende del intendente, y que el intendente puede remover del cargo en cualquier momento por alegar más desempeño”, amplió Gigliani.
Explicó que en 2014 ya existía una ordenanza con similares características, que demoró dos años en ser reglamentada, pero que nunca se aplicó. En ese entonces, se habían realizado dudosas inversiones en la ciudad, por lo que se llevaron adelante varias denuncias por presuntas actividades ilícitas.