El Gobierno ruso condenó hoy el intento de magnicidio perpetrado anoche contra la vicepresidenta Cristina Fernández frente a su domicilio, en el barrio porteño de Recoleta.
"Gracias a Dios, no ocurrió una tragedia", dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa diaria telefónica en la que, consultado por periodistas, negó que el presidente ruso, Vladímir Putin, tenga planeado telefonear a Fernández.
Un hombre fue detenido anoche tras intentar disparar contra la vicepresidenta en los alrededores de su domicilio cuando se celebraba una vigilia en su apoyo. El atacante es un brasileño de 35 años con antecedentes penales.
El presidente Alberto Fernández condenó el "atentado", que consideró el hecho "más grave" desde que Argentina retornó a la democracia en 1983 y declaró el día de hoy como feriado nacional para que la sociedad argentina manifieste "en paz" su rechazo a la violencia.
Presidentes y expresidentes de la región emitieron inmediatas declaraciones de condena por el ataque.
