La huelga comenzó luego de un accidente en la descarga de un buque que provocó el fallecimiento de un operario. El gremio de estibadores (Supa) continúa responsabilizando a la empresa concesionaria (TPR) por la falta de condiciones de seguridad.
El sindicato expresó en la denuncia “De manera deliberada, pese a todo lo conversado en la audiencia celebrada ante este Ministerio y pese al gravísimo evento acaecido el pasado viernes que le costó la vida a un compañero, la empresa persiste en su intención de imponer a los estibadores que continúen trabajando, sin adoptar las medidas básicas e indispensables para garantizar su seguridad y salud”.
Además remarcaron “el Estado, como órgano de contralor y guardián del cumplimiento de la ley, no puede consentir que la desidia de una empresa y su falta de inversión pongan en riesgo la vida de las personas que trabajan para ella” y en ese sentido exige que “no se debe permitir ni tolerar que Terminal Puerto Rosario siga con sus constantes incumplimientos de toda índole”.