Un estudio publicado en la revista Science, alertó que las fuentes de agua dulce más importantes del mundo están perdiendo agua a un ritmo acumulado de unas 22 gigatoneladas anuales. El 56% de la disminución se debe al calentamiento climático y al consumo humano, siendo el calentamiento “la mayor parte”.
El estudio se llevó a cabo por el investigador estadounidense Fangfang Yao, quien a través imágenes satelitales dio a conocer que un 53% de los mayores lagos del mundo perdieron una notable cantidad de agua.
Además, descubrió que dos tercios de los embalses más importantes del mundo sufrieron pérdidas significativas de agua.
Yao espera que sus hallazgos hagan tomar conciencia tanto a las autoridades como a los ciudadanos, de modo que se puedan proteger las masas de aguas y sus ecosistemas.
Las pérdidas se producen tanto en zona áridas como en zonas húmedas, lo que demuestra que esta esta tendencia esta más extendida de lo que se pensaba anteriormente.
A pesar de las noticias devastadoras, todavía queda una gota de esperanza ya que uno de los lagos estudiados, el Sevan, de Armenia, vio crecer sus niveles de agua gracias a los esfuerzos por parte de las autoridades de limitar el consumo humano.