El gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, manifestó su profunda inquietud respecto a las primeras medidas tomadas por el gobierno de Javier Milei. El análisis del mandatario riojano es desfavorable, describiendo las medidas como un acto de "crueldad, sadismo y salvajismo pocas veces visto", llegando a calificarlas como un "genocidio social".
Quintela señaló que la población estará gravemente afectada, enfrentando dificultades para adquirir incluso la canasta básica familiar, y expresó su preocupación por la falta de un plan económico claro que impulse el crecimiento del país.
"No tienen ningún mensaje alentador", afirmó el gobernador, destacando la ausencia de propuestas para superar la crisis.
La situación se torna aún más crítica al abordar el tema del precio de la nafta, con colas interminables en las estaciones de servicio, donde se espera que el litro alcance los $970.
"La sociedad estaba advertida de que esto iba a suceder, todos creían que era la campaña del miedo", añadió Quintela.
Con respecto a la reversión del impuesto a las ganancias, el gobernador mencionó la propuesta respaldada por 22 gobernadores, incluido él mismo, para cubrir el desfasaje con el 50% del impuesto al cheque.
Sin embargo, aclaró que no irá en contra de lo que votaron previamente.
Respecto a la paralización de la obra pública anunciada por Caputo, Quintela destacó los cerca de 1.700 despidos en ese sector en la provincia y la falta de sustento para las personas afectadas.
Afirmó la importancia de garantizar la rentabilidad para atraer inversiones del sector privado y expresó: expuso: “tenemos cerca de 1.700 despedidos en el sector de la obra pública, y generó el despido de esas personas, que se quedan sin sustento para sus hijos”.
En cuanto a la reducción de Ministerios a nivel nacional, el mandatario opinó que la medida es gestual y tiene un impacto mínimo. Sin embargo, destacó que esta reducción ha generado un mensaje de odio hacia la clase política, con consecuencias que repercuten en la mayoría del pueblo argentino.
Quintela lamentó el crecimiento exorbitante de los precios, ejemplificando con el elevado costo de la nafta súper en su provincia.
También abordó la problemática de la garantía de la prestación del servicio público de pasajeros en un contexto de inflación descontrolada
En el cierre de la entrevista, Quintela expresó su preocupación por las festividades venideras, anticipando un panorama complejo para la sociedad durante la Navidad y Año Nuevo. "Espero que no haya problemas, no hablo de posibles saqueos sino de dificultades que tendrá la sociedad para tener una mesa navideña digna", concluyó el gobernador.
