En alusión a una supuesta frase del presidente Javier Milei sobre «fundir a las provincias» que no cooperen para que sus legisladores voten a favor de la iniciativa gubernamental, Melella consideró que algunos discursos son a veces agresivos, violentos, y cree que querer demonizar a los gobernadores es un error tremendo porque no funden a un gobernador con nombre y apellido, sino que funden a una población.
En ese sentido, el gobernador fueguino afirmó: «Parece que los gobernadores y diputados somos el mal del país», y advirtió que en las elecciones «así como lo eligieron a Milei, eligieron a los 23 gobernadores más el Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires».
Melella expresó también su «preocupación» por la forma en que se está desarrollando el debate de la ley «Bases» en el plenario de comisiones de la Cámara baja, porque «no se pueden tratar con seriedad tantas leyes de un momento para el otro».
Hay urgencias en el país, lo económico, lo social y alimentario, pero una reforma electoral no es urgente», ejemplificó.
El gobernador también dijo no estar a favor de delegar facultades ni a Milei, ni a Mauricio Macri, ni a Cristina Kirchner, ni a Alberto Fernández, ni a nadie.
