El neerlandés, líder absoluto del certamen consiguió de esta manera su triunfo número 61 en la F1 a sus 26 años, que le sirvió para seguir aumentando su liderato en el Mundial hasta los 69.
La carrera fue la Nº 1111 de la historia de la Fórmula 1, en donde cerca de 160 mil espectadores estuvieron siguiéndola en el predio de Montmeló durante el fin de semana.