Dos viviendas que funcionaban como puntos de venta de drogas fueron derribadas en la mañana de este miércoles por orden judicial en la ciudad de Rosario, en el marco de la Ley de Microtráfico aprobada a fines de 2023, impulsada por el gobierno de Maximiliano Pullaro, y que fue parte del paquete de acciones que el Ejecutivo provincial propuso para atacar el delito y la violencia.
En este caso, los inmuebles estaban ubicados sobre calle Misiones al 2100 y al 2200, en barrio Santa Lucía, y de dichos domicilios se pudo establecer que partieron los autores de los homicidios del colectivero Marcos Daloia, quien fue atacado a tiros el pasado 7 de marzo, y del playero Bruno Bussanich, asesinado el 10 de marzo en un brutal ataque en su lugar de trabajo.
En el lugar de los derribos, el fiscal Franco Carbone recordó que “habíamos pedido judicialmente el derribo de estas dos instalaciones, pero la jueza había considerado que el delito podía cesar con la inactivación de los lugares.
Sin embargo, luego de las medidas, ambos lugares fueron intrusados por personas que siguieron cometiendo delitos por lo que recurrimos nuevamente a la justicia a solicitar el derribo de ambas instalaciones”.