El jefe del Estado utilizó un dato que brindó el rector de la Universidad Nacional de Rosario, Franco Bartolacci, en el canal de televisión porteño LN+ y planteó una cuenta elemental de división al revés. Invertida por apuro o malicia para argumentar superpoblación de empleados en las casas de estudios superiores.
“Universidad Nacional de Rosario. Alumnos: 85.000 Empleados: 10.500 ¿8 empleados por cada alumno? Se los dejo para pensar…”, escribió Milei en un retuit de la red social X. Lo de pensar era antes, al plantear la cuenta, que en modo correcto, de primaria, da como resultado 0,12 empleados por alumno.
La incontinencia tuitera del presidente con matemática elemental fallida fue durante la jornada en la que la Cámara de Diputados blindó el veto presidencial a la ley de financiamiento universitario que, mínimamente, permitía a las universidades no continuar perdiendo financiamiento y a sus trabajadores, docentes y no docentes, recuperar en parte los ingresos caídos por inflación y el ninguneo de las paritarias del oficialismo.