En la parte dispositiva, establece que “se llevará a cabo entre sectores de la gastronomía, horticultura urbana y patrocinadores privados con el fin de ofrecer alimentos saludables en la ciudad”.
Define huertas, establecimientos gastronómicos, sponsors, objetivos, pautas de funcionamiento, publicidad, financiamiento, registro de participantes, y a la Subsecretaría de Economía Social como autoridad de aplicación.
Explicó el edil Mariano Roca, de Arriba Rosario, autor de este proyecto, que luego de la crisis del año 2001 proliferaron las iniciativas que tenían que ver con la cuestión alimentaria.
Para el concejal se trata de “un eslabón más en la larga cadena de una verdadera política de Estado en la ciudad de Rosario”.
Repasó además el nacimiento de las normativas de agricultura orgánica y la agricultura urbana, y la radicación de las siete huertas comunitarias que producen unas 2500 toneladas al año de verduras, hortalizas, frutas, aromáticas.
Luego confesó que tras visitar la experiencia de Sunderland, pensó que “la propuesta podía ser escalable a nivel urbano” en muchos de los 1500 establecimientos gastronómicos de la ciudad.
Habló de las bondades de los productos agroecológicos que prescinden de aditivos químicos para su cultivo, y dijo: “Nos parece que es una oportunidad para la ciudad, con impacto positivo en lo social, y en lo económico para las familias de huerteros y huerteras”.
