El presidente ruso, Vladimir Putin, ya advirtió a las naciones occidentales contra esa medida, y afirmó que representaría la "participación directa" de la alianza militar de la OTAN en la guerra de Ucrania.
La decisión de Washington sobre el ATACMS está formulada en términos de limitarse a la defensa de las fuerzas ucranianas dentro de la región rusa de Kursk, donde Kiev lanzó una incursión sorpresa en agosto.
La administración de Biden deja entrever a Ucrania que apoyará sus esfuerzos por conservar la pequeña porción de territorio ruso que ocupa actualmente, como una poderosa moneda de cambio para cualquier posible negociación en el futuro.