A pedido de las entidades que nuclean a taxis y remises, se prorrogó por el término de dieciocho (18) meses la vida útil de los vehículos que “hubieren cumplido los seis (6) años de antigüedad, al igual que para aquellos que alcancen dicha antigüedad el 31/12/2024”.
Asimismo, se prorroga por doce (12) meses “cuando se pueda corroborar que los titulares están a la espera de la entrega de un vehículo cuyo modelo cumpla con la vigencia exigida por la normativa o cuentan con un plan de pago para la obtención del mismo”.
Por otro lado, en materia de movilidad, se aprobó un decreto que le encomienda al departamento ejecutivo gestione el cese de la publicidad en vía pública de aplicaciones de taxis y remises no habilitadas por el municipio.
María Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular, expresó la contradicción que le genera la situación: “Por un lado, el contexto socioeconómico y la dificultad para renovar unidades, y por otro, la queja más frecuentes que es el (mal) estado de las unidades”.
“Eliminar el canon no va a permitir cambiar las unidades, pero se trata de ´tirarles un centro´ a los titulares para que puedan seguir operando como servicio público en la ciudad”, opinó.
Verónica Irizar, del bloque Socialista aseguró que todos están buscando una salida favorable a la situación del taxi en este contexto socioeconómico. Se buscó a su entender mejorar el sistema con la ordenanza de aplicaciones. Es decir, equilibrio en la búsqueda de la calidad del servicio y por otro lado la realidad económica con la suba de los costos.
“Esta es una salida posible en un contexto complejo que atraviesa a toda la economía y en particular a los taxis y remises”, agregó.
Por otro lado, en materia de movilidad, se aprobó un decreto que le encomienda al departamento ejecutivo gestione el cese de la publicidad en vía pública de aplicaciones de taxis y remises no habilitadas por el Municipio.